DPIT
Es un procedimiento para crear conexiones nuevas entre dos vasos sanguíneos en el hígado. Usted puede necesitar este procedimiento si tiene problemas hepáticos graves.
No se trata de un procedimiento quirúrgico, sino que lo realiza un radiólogo usando rayos X. Un radiólogo es un médico que usa técnicas imagenológicas para diagnosticar y tratar enfermedades.
Le solicitarán que se acueste boca arriba y lo conectarán a monitores para verificar su frecuencia cardíaca y presión arterial.
Usted probablemente reciba anestesia local y medicamentos para relajarse, lo cual hará que le dé sueño y no sienta dolor, o puede que le apliquen anestesia general (estará dormido y no sentirá dolor).
El radiólogo introducirá un catéter (una sonda flexible) a través de la piel dentro de una vena en el cuello.
Esta nueva ruta permitirá que la sangre fluya mejor y aliviará la presión en las venas del estómago, el esófago, los intestinos y el hígado.
Normalmente, la sangre proveniente del esófago, el estómago y los intestinos fluye primero a través del hígado. Cuando el hígado tiene mucho daño y hay obstrucciones, la sangre no puede fluir muy fácilmente a través de éste. Esto se denomina hipertensión portal (aumento de la presión y represamiento en la vena porta).
Las causas comunes de la hipertensión portal son:
Este procedimiento permite que la sangre fluya mejor en el hígado, el estómago, el esófago y los intestinos, y luego de nuevo al corazón.
Los riesgos posibles de este procedimiento son:
Los riesgos infrecuentes son:
El médico puede pedirle que se haga estos exámenes:
Coméntele siempre al médico o al personal de enfermería:
En el día de la cirugía:
Después del procedimiento, usted se recuperará en una habitación del hospital y lo vigilarán por si se presenta sangrado. Deberá mantener la cabeza elevada.
Generalmente, no se presenta ningún dolor después del procedimiento.
Se podrá ir para su casa cuando se sienta mejor, posiblemente al día siguiente de la cirugía.
Muchas personas regresan a sus actividades cotidianas en 7 a 10 días.
El médico probablemente haga una ecografía después de la cirugía para verificar que el stent esté funcionando correctamente.
Asimismo, le solicitarán que se someta a otra ecografía al cabo de unas semanas para constatar que el procedimiento de derivación portosistémica intrahepática transyugular (DPIT) esté funcionando.
El radiólogo puede decirle de inmediato cómo funcionó el procedimiento. La mayoría de los pacientes se recuperan bien.
La derivación portosistémica intrahepática transyugular funciona en aproximadamente el 80 al 90% de los casos de hipertensión portal.
El procedimiento es mucho más seguro que la cirugía y no implica ningún corte ni suturas.
Garcia-Tsao G. Cirrhosis and its sequelae. In: Goldman L, Schafer AI, eds. Cecil Medicine. 24th ed. Philadelphia, Pa: Saunders Elsevier; 2011:chap 156.
Shah VH, Kamath PS. Portal hypertension and gastrointestinal bleeding. In: Feldman M, Friedman LS, Brandt LJ, eds. Sleisenger & Fordtran's Gastrointestinal and Liver Disease. 9th ed. Philadelphia, Pa: Saunders Elsevier;2010: chap 90.
Sicklick JK, D'Angelica M, Fong Y. The liver. In: Townsend CM, Beauchamp RD, Evers BM, Mattox KL, eds. Sabiston Textbook of Surgery. 19th ed. Philadelphia, Pa: Saunders Elsevier; 2012:chap 54.